El colectivo reclama al Gobierno eliminar los mecanismos de ajuste, rebajar el IVA y aplicar la doble tarifa eléctrica
La factura eléctrica de las Comunidades de Regantes han aumentado un 600% en el último año y se han multiplicado por más de 10 desde 2008, cuando desaparecieron las tarifas eléctricas para el regadío. El colectivo alerta de que ya hay Comunidades de Regantes que no van a poder hacer frente a los recibos y así se lo ha hecho saber Fenacore a los ministerios de Agricultura y Transición Ecológica a través de sendas cartas, ratificadas por los regantes leoneses, según remarca el presidente de Ferduero y del Sindicato Central de Barrios de Luna, Ángel González Quintanilla.
El precio del kWh ha subido más del triple comparado con el que pagaban el año pasado. De media, el periodo P6 (el más barato para los regantes) en 2021 estaba en torno a los 5 céntimos/kWh, cuando este año el precio en P6 está costando como mínimo más de 15-16 céntimos/kWh.
Y si esta escalada ya supone una subida del 300% de media en la parte de energía que tienen que afrontar los regantes como consecuencia de la crisis energética, Fenacore recuerda que el pasado mes de mayo se aprobó el establecimiento de los Mecanismos de Ajuste para el gas, lo que está suponiendo en la factura alrededor del 45% antes de impuestos (IVA).
Frente a esta situación, que amenaza una necesidad tan básica como la producción de alimentos, Fenacore urge a eliminar el concepto de los Mecanismos de Ajuste en los suministros para riego.
En paralelo, los regantes exigen un IVA reducido del 5%, como actualmente disfrutan todos los suministros domésticos, lo que ayudaría a estos agricultores a abaratar más de un 30% su factura eléctrica, siempre y cuando la medida se acompañara de la posibilidad de contratar dos potencias eléctricas al año.
Por ello, el colectivo reitera su crítica a la «inacción y falta de voluntad política que impide discriminar la época de riego», teniendo en cuenta que Agricultura «llegó a incluir una disposición en la Ley que impulsó para mejorar el funcionamiento de la cadena alimentaria, aunque ahora descarte la opción de contratar la doble potencia». Añaden que la Ley de la sequía de 2018 ya contemplaba en sus disposiciones adicionales la firma de un contrato de temporada para los meses de máximo consumo y de otro con una potencia mínima para el resto del año, con el que simplemente mantener los equipos; y que, más recientemente, «también se recogía la disposición final de una enmienda aprobada en el marco de la negociación de los Presupuestos Generales del Estado de 2021».
En este contexto, Fenacore confía en que la Mesa Nacional del Regadío y el Observatorio de la Sostenibilidad del Regadío tengan entre sus principales objetivos la rebaja de la factura eléctrica, puesto que este abaratamiento resultaría determinante para avanzar en la modernización de este tipo de agricultura y facilitar el acceso a las ayudas comunitarias.
Los regantes explican que la constitución de la Mesa y el Observatorio parte del Ministerio de Agricultura, pero las medidas del sector eléctrico para contratar dos potencias competen al Miteco y las fiscales para rebajar el IVA incumben a Hacienda. De ahí, la propuesta de Fenacore de implementar un Plan de acción política transversal e integral que alivie la situación de estos agricultores, eleve la gestión del agua a una cuestión de Estado y garantice la ejecución de los fondos europeos.
Artículo del Diario de León: Artículo